Dicen algunos expertos que el tiro con arco es un deporte especialmente recomendado para acabar con el estrés. Otros, algunos de ellos tiradores con muchas dianas a sus espaldas, afirman que tal y como está el panorama actual, más que calmar los nervios pone los pelos de punta. Y es que la reciente expulsión de la Federación Cántabra de la Española tiene a esta modalidad patas arriba.
En la región existen nueve clubes de arqueros que figuran en la página oficial de la Federación Cántabra, tres de ellos con más peso que el resto: Club de Arqueros del Real Valle de Camargo, Club Arqueros de Castro y Club de Arqueros de Suances. El resto, según algunos practicantes de esta disciplina, «son fantasmas, no existen». Incluso hay una escuela deportiva, la del Ayuntamiento de Camargo, esta temporada con 30 alumnos. En total, un centenar de personas practican el deporte de Robin Hood y Toro Sentado en sus tres modalidades.
El tirador de arco suele ser una persona adulta, con cierto poder adquisitivo, aunque también hay chicos y chicas apuntando con sus flechas a la diana. Un equipo cuesta desde 300 euros hasta lo que cada uno quiera gastarse. «Es como lo de las bicicletas, que las tienes de muchos precios; pero si eres un poco caprichoso te puedes gastar una fortuna», dice uno de los arqueros de la región.
El perfil del tirador
El tiro con arco lo puede practicar cualquier tipo de persona o, al menos, eso es lo que dicen los que saben de ello. No hay más límites que los que marcan las distintas categorías, en las que después de las inferiores (alevín, infantil…, etc) está la senior -mayores de 18 años- y la de adultos -tiradores de más de 50-. Luego existen distintos tipos de arcos que tienen, incluso, su propia modalidad: Olímpico, compuesto y tradicional. Todas ellas tienen discípulos en Cantabria.
Cinco campos de tiro
Al parecer, un centenar de personas practican el tiro con arco en la región. La cifra es extraoficial, teniendo en cuenta que hay tres clubes no inscritos en la federación y que han logrado la pertinente licencia fuera de Cantabria.
Lo que sí hay es media decena de campos de tiro, localizados en Cacicedo, Suances, Escobedo de Camargo, Castro Urdiales e Hinojedo. También hay un calendario de competiciones que establecía hasta ahora la disputa de los correspondientes campeonatos regionales.
LA POLEMICA
La expulsión de la Federación Cántabra de Tiro con Arco (FCTA) de la Federación Española ha desatado la polémica, toda vez que es un hecho sin precedentes. Lo cierto es que los arqueros de la región no quieren hablar del tema. Están como amordazados. Sólo llegan a decir que «a mí lo único que me preocupa es el deporte en sí. Poder usar el arco lo más posible». En la Federación Cántabra, ayer, su secretario se negó a contestar a las preguntas de EL DIARIO MONTAÑÉS, cuestiones todas ellas relativas a la práctica de la especialidad.
Lo cierto, ahora, es que la expulsión se ha hecho oficial y que la cántabra sufre un tremendo varapalo al señalarse desde Madrid que se debe «al cúmulo de despropósitos» de los dirigentes regionales, así como a las denuncias de algunos clubes. Asimismo, se ha multado a la FCTA con 2.000 euros y su presidente fue depuesto de su cargo en el máximo organismo.
Fuente: El Diario Montañés